Por Juan Alonso Romero
“El equipamiento urbano, se refiere al conjunto de instalaciones y espacios públicos, que satisfacen las necesidades básicas de la comunidad. Con una mejora importante en la calidad de vida de los habitantes de una zona urbana”. Literatura sobre el tema.
EL ESTADIO DE FÚTBOL
Para la AFEN, sus equipos amateurs afiliados, para toda la afición al fútbol del estado de Nayarit, la destrucción del Estadio Nicolás Álvarez Ortega, fue una ofensa difícil de olvidar. Una bofetada con guante oscuro a toda la limpieza y nobleza que significa el deporte. Al respeto que se debe de tener al equipamiento urbano ya construido, al que únicamente, hay que darle el mantenimiento que este necesite.
Derribar al estadio, fue un acto irresponsable, que dañó seriamente al fútbol profesional y amateur del estado.
Una ofensa y humillación para quienes en él transitaron en el Torneo “Al Agua Patos”, para equipos infantiles.
Como para el Club Deportivo Coras y a sus aficionados.
Un daño económico y moral, para las familias que dependían de las actividades deportivas.
Daño para los atletas de varias ramas del deporte, que en él entrenaban.
Fue un espacio perdido para muchas competencias deportivas municipales, estatales y regionales.
LA REIVINDICACIÓN
Era hora, muy esperada la acción del gobierno del estado, regresando a los deportistas y a la afición, ese estadio, insignia del fútbol nuestro.
De quienes lo practican los fines de semana.
De niños y jóvenes que participan en torneos.
De la afición.
Del pueblo en general.
RECURSOS ETIQUETADOS
El gobernador Miguel Ángel Navarro Quintero, con la construcción del Estadio, está reivindicando la dignidad del fútbol, de los futbolistas amateurs y profesionales. Pero igualmente, de la afición.
Está reviviendo la ilusión de tener de nuevo nuestro estadio.
Para que regrese el fútbol profesional a Nayarit, con todas las de la ley.
Con un Estadio decoroso, moderno y bien equipado.
Etiquetando recursos, que tienen ya ese destino y es necesario ejercerlos para esa obra concreta: el nuevo Estadio Nicolás Álvarez Ortega. No lo deben impedir los malos entendidos, ni las pasiones de nadie. El estadio debe construirse. Es un equipamiento urbano necesario para Tepic. Para la promoción del deporte, el turismo local, regional y nacional. Se necesita para competencias deportivas locales, regionales y nacionales. Eventos cívicos, sociales y culturales, que Nayarit debe de desarrollar ya hoy, no se diga mañana.
CULTURA Y DEPORTE NO ESTÁN REÑIDOS
Las civilizaciones antiguas de Grecia y Roma, nos enseñaron que cultura y deporte son conceptos hermanos. No riñen, ni tienen diferencias, por el contrario, son complementos. El principio de “cuerpo sano en mente sana”, amarra muy bien la relación entre cultura y deporte.
Bien hubiera sido que, mediante el hilo conductor del sentido común, el diálogo, se hubiera llegado a acuerdos con quienes manejan los espacios culturales ubicados cerca de la construcción del Estadio. Para reubicarlos en áreas cómodas y decorosas, donde puedan realizar su importante misión.
Quizá les faltó a los colaboradores del Ejecutivo, ejercicio de operación política, sobre este tema: negociar con tiempo la reubicación de los espacios culturales. Creo que eso fue todo lo que permitió los malos entendidos.
Reubicar esos espacios culturales, para que se construya un estadio respetando su diseño original, es clave e importante.
Para que cuente con entradas y salidas amplias y seguras para los aficionados.
Estacionamiento para los autobuses que trasladan a los equipos.
Como para el manejo de insumos necesarios en cada partido.
AMBAS PARTES ESTÁN BIEN
Creo en la buena fe y en la confusión natural del área de la cultura ante la obra. Eso es lo que sucedió y hemos visto. No veo pleito, ni cerrazones.
Esperemos que se haga la oferta de edificios equivalentes a donde ahora están, para que puedan realizar sus labores cotidianas. Sin embargo, como la política es el “arte para resolver problemas”, es necesario que hable la política con fundamentos serios de negociación constructiva. Con el trato fino de la diplomacia, que respeta el derecho de la parte reclamante, para atenderla con verdad y certeza.
TENGO OPTIMISMO
Creo en la buena voluntad del gobernador Miguel Ángel Navarro Quintero. Creo en la buena voluntad de los representantes de la cultura. Creo en el sentido común, en el diálogo y en las negociaciones. En la construcción de acuerdos y las soluciones idóneas para ambas partes.
